La velocidad del fuego

Si esta fuera la sala de estar de un hogar que se había ido a la cama, este fuego podría ser incontrolable para cuando se despertaran para encontrarlo. Las llamas podrían terminar bloqueando sus vías de escape, y el humo inhalado a los pulmones en pánico podría convertirse en mortal.

Incluso si el hogar estuviera despierto y alerta, y se produjera un incendio en la habitación contigua, la naturaleza rastrera del fuego hace que sea difícil de detectar hasta que se haya convertido en una fuerza significativa. Los incendios domésticos son devastadores y, con demasiada frecuencia, terminan en una tragedia en la que los detectores de humo están ausentes, se les han quitado las baterías o han fallado por completo.

Asegúrese siempre de revisar sus detectores de humo con regularidad. Reemplace las baterías desgastadas a los primeros signos de reducción de energía, y no retire las baterías de alarma de humo para alimentar otros artículos o para reducir las falsas alarmas. Si tiene falsas alarmas con frecuencia, una alarma de humo fotoeléctrica podría ser su mejor solución: algunas tienen baterías integradas que no se pueden quitar, lo que agrega una capa adicional de seguridad.

Protección contra incendios en Espacios grandes

Un incendio forestal proporciona condiciones casi perfectas de laboratorio para que el fuego se propague: un gran espacio lleno de combustible y oxígeno, con vientos predominantes para ayudar a la oxidación. Esas condiciones se pueden replicar en interiores – en edificios grandes con diseños de planta abierta.

Piense en los modernos centros comerciales o museos, donde los espacios para caminar sin interrupciones se encuentran con techos cavernosamente altos. La ventilación motorizada mueve el aire y, aunque el edificio en sí será resistente al fuego, se pueden encontrar materiales combustibles en todas partes dentro de él. Sin una protección adecuada contra incendios, el fuego podría propagarse tan fácilmente como en un incendio forestal, solo que ahora en un espacio cerrado, lleno de personas.

La protección contra incendios para edificios interiores grandes y abiertos se puede lograr con la protección activa contra incendios: sistemas de alarma avanzados, rociadores y, por supuesto, cortinas cortafuegos.

A diferencia de otras formas de protección contra incendios, las cortinas cortafuegos ofrecen compartimentación en espacios abiertos, lo que evita la propagación del fuego y gana un tiempo precioso para que los ocupantes escapen.

Mantenerse al día con el fuego

En Coopers Fire, continuaremos avanzando en nuestra investigación y desarrollo de cortinas cortafuegos y protección contra incendios. Cuanto más aprendamos sobre la reducción de la velocidad de fuego, mejores serán nuestros productos y más seguros serán los edificios de planta abierta, sin sacrificar el diseño. Para obtener más información, o para inscribirse en nuestros cursos de formación educativa, llámenos al 02392 454 405 o envíe un correo electrónico [email protected]

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