7-Amor

El reciente interés en el pensamiento de Alain Badiou ha tenido un efecto adicional y bienvenido de volver la atención crítica a la idea filosófica del amor. El amor, como es bien sabido, constituye una de las cuatro «condiciones» de la filosofía de Badiou. Pero con su pronunciamiento de que «ningún tema requiere más lógica pura que el amor», el filósofo contradice de un solo golpe la tradición literaria-histórica que, siguiendo las pautas de Platón, ve el amor como la excepción salvadora de la lógica. Para Badiou, el amor debe considerarse en términos de una lógica excepcional que al mismo tiempo confirma la operación de conteo filosófico, mientras genera otro número que no es producto de la ordenación. Badiou comienza así sus investigaciones sobre el amor desde un lugar muy diferente al de Aristófanes en el Simposio, para quien «el amor nace en cada ser humano; reúne las mitades de nuestra naturaleza original; trata de hacer una de dos y sanar la herida de la naturaleza humana» (Platón, Simposio 191d). Para Badiou, como para Jacques Lacan, con quien el filósofo está en diálogo continuo a lo largo de sus escritos sobre este tema, el amor es cualquier cosa menos una sustancia adhesiva, un «pegamento» medieval que une dos sujetos trágicamente divididos a una sola unidad amorosa. Para Badiou, como para Lacan de nuevo, el amor complementa la cuenta como uno proporcionando el soporte de un universalismo vaciado de la relación de objeto, que el filósofo llama la «escena de los Dos».